Pinar del Río, 25 de marzo del 2017
A: Roberto Díaz Menéndez
Presidente de la Asamblea Municipal del
Poder Popular en Pinar del Río.
De: Municipios de Oposición de Pinar del Río.
“Sera justo que los que ostentan el poder y dicen ser los representantes del pueblo vivan en lujosas y enormes casas cuando un gran número de familias viven en casas semidestruidas y en condiciones verdaderamente deplorables”
El Municipio de Oposición de Pinar del Río toma en cuenta la falta de fiscalización de los funcionarios e instituciones estatales por parte de los ciudadanos, en el cumplimiento de sus deberes, por una predisposición política del gobierno en pro de mantener el control absoluto de poder. Lo que hace que a los órganos de gobierno y sus representantes gocen de total impunidad. Las soluciones vienen precedidas de justificaciones históricas, que no cumplen con la solución de los problemas. Esa es la razón por la que, como Municipio de Oposición, tenemos intenciones bien marcadas de asumir el poder político y social para así cumplirle a nuestro pueblo sus aspiraciones, no engañarlo con falsas promesas.
Tal es el caso de las familias que viven en la comunidad de La Nilda, (Portilla) Río Seco, a 16 kilómetros de la carretera a San Juan y Martínez. En este asentamiento poblacional, se encuentran más de 30 familias damnificadas que fueron reagrupadas en los albergues a consecuencia de los ciclones Lili e Isidore. Este albergue había sido una unidad militar del Ejercito Juvenil del Trabajo, y en el año 1994 pasó a un Batallón de Fuerza de Trabajo, hasta que en 1995 se convirtió en un almacén de tela de tapado. En el año 2002 con el paso de los mencionados ciclones, albergaron a los damnificados residentes en Santa Damiana, Forteza y Río Seco, familias pobres de muy bajos ingresos que no contaban con medios propios para reconstruir sus hogares.
Al mes de estar albergadas, se personaron en el lugar el otrora Vicepresidente del Consejo de Estado y de Ministros Carlos Laje Dávila, acompañado de la ex primera Secretaria del Partido en la provincia María del Carmen Concepción y otros funcionarios del Gobierno y el Partido. Delante de todos los vecinos del lugar Laje manifestó; “me comprometo a que muy pronto tendrán sus casas”. Todos muy ilusionados esperaban una respuesta inmediata para solucionar la penosa situación en la que se encontraban, ya que muchos no sólo habían perdido su hogar, sino, su terruño, sus comodidades y hasta sus pertenencias. Al principio las organizaciones de masas entregaban almuerzo y comida, y eran visitados diariamente por un médico de familia. El Delegado en función en aquellos momentos Sergio Carrelegua con frecuencia los visitaba y en las asambleas manifestaba que lo prometido seria cumplido que tenían que tener paciencia y esperar. A penas transcurrido unos meses, desaparecieron las atenciones y las promesas hechas.
Después de todo este teatro, todos los años venía una Comisión del gobierno y de la Dirección de Vivienda y no resolvían nada. Transcurrido unos años comenzaron a deteriorarse los techos de las improvisadas viviendas y la solución que dio Sergio Carrelegua, ex delegado del Poder Popular fue mandar a quitar los techos de los baños, para ponerlos en los techos de las viviendas afectadas, quedando los baños sin techos.
La situación empeora en la primavera a causa de las lluvias, para los ancianos para quienes, por su delicado estado de salud, mojarse supone un mayor riesgo. “En tiempo de lluvia hay que hacerlo todo (también las necesidades fisiológicas) dentro del cuarto”, cuenta una anciana para ilustrar el “infierno” en el que vive.
“No sé cuántas veces he ido al Gobierno municipal a exigir que nos ayuden, pero no hacen nada”, dice Arelys Rodríguez, esposa de Sánchez, mientras muestra las escasas condiciones higiénico-sanitarias que tienen los baños a la intemperie.
“Tengo que cargar el agua para tomar desde casa de los vecinos, porque los tanques elevados de los albergues están destapados, les han sacado ranas, murciélagos y hasta palomas en estado de descomposición.
Todos los delegados y dirigentes de turno visitaban el lugar y hacen las mismas promesas. Después de 14 años quedan 16 familias, sobreviviendo a las inclemencias del tiempo, dificultades, insatisfacciones, escases, pasando frio, sin condiciones higiénico sanitarias, sin agua potable, rodeados de insectos y roedores, muchos de ellos enfermos de cáncer; un joven de 27 años que está en fase terminal, una señora con un seno amputado,2 impedidos físicos, han muerto 8 personas en espera de resolver sus problemas, y otros con la agonía de ver pasar largos años sin que nadie resuelva sus casos.
En la actualidad ya todos los planes ejecutados anteriormente están sin validez, ya que las últimas informaciones que le dieron a las familias que allí sobreviven es que van a remodelar los albergues para buscar un mejor confort y mejorar la situación de vivienda de esas familias, pero ya nadie cree las promesas de los funcionarios del gobierno.
Lo esencial de la situación y la problemática que existe en esta comunidad respecto a las familias que han sufrido 15 años de abandono y engaño por parte del gobierno y el estado es que todavía no existe una solución a corto plazo y estas familias continuarán viviendo en condiciones precarias.
Las instancias gubernamentales deben tomar medidas, que resuelvan cuanto antes la crítica situación en que viven estas familias, que han sido abandonadas y engañadas por más de 15 años. La provincia exhibe y promociona sus mejores galas ante el mundo, pero oculta y olvida la realidad en que viven la mayoría de los cubanos.
A este caso se suman los de otras personas que sufren igual situación, lo que evidencia el fracaso del sistema económico y social que se experimenta a en Cuba por más de medio siglo. Por ejemplo Ada Ivis Trujillo residente en la Carretera Central kilómetro 89 del poblado Montequín, provincia Pinar del Rio. Esta vivienda fue declarada derrumbe total desde los ciclones Lili e Isidoro, del año 2002 y aún está a la espera de una posible solución.
Ada, es graduada en Educación Primaria y desde el nacimiento de su niño, Mario Alejandro, nunca más ha podido trabajar porque su hijo presenta una Fibrosis Quística y necesita cuidados permanentes, junto a la cantidad de ingresos que ha tenido en el Hospital Pediátrico Provincial “Pepe Portilla”.
En este callejón sin salida se encuentra también Idalmis Rodríguez Mena, quien vive con su hija Irabelis Martínez Mena con sus dos hijos pequeños, Sandiel de 1 año y Samuel de 3 años, además de su abuela de 76 años Oria Menas Valdés que padece de esquizofrenia paranoide y demencia senil transitoria. Esta familia residente en Avenida Alameda No 19, subsisten de sólo un salario, y el techo que les cobija está en peligro de derrumbe. Al que llaman hogar no cuenta con servicio sanitario, ni agua potable, lo que hace más crítico su estado constructivo.
Por todo esto el Municipio de Oposición de Pinar del Rio cuenta con la autoridad moral para demandar socialmente al Gobierno Municipal y a todos los funcionarios de las diferentes instituciones correspondientes.
Atentamente:
Rafael Martínez Haces
Presidente del Municipios de Oposición en Pinar del Rio.
Sandra Haces Ramos,
Comisionado de Información y Prensa.